lunes, 27 de febrero de 2012

Megaminería, luchas populares y represión

Por Vanesa Guajardo

Los confictos de los último meses han puesto en la escena nacional las distintas luchas provinciales contra los proyectos megamineros. La respuesta de los gobernadores oficialistas y del gobierno de CFK desató un repudio aún más generalizado . La represión a los manifestantes ha sido tan brutal que hace imposible tapar el sol con un dedo. Por mas que no quieran darle tanta relevancia, o propongan un “discusión seria”, los hechos hablan por sí solos, mostrándonos quiénes están de este lado de la vereda, por un lado los que resisten a estos megaproyectos mineros y quiénes están enfrente allanándole el camino a estas empresas imperialistas.



Después de la resistencia contra el emprendimiento minero en el Famatina las cosas se tornarían más delicadas. La “histórica pueblada” en Famatina y Chilecito se hace sentir en todo el país, y claro, no se hace esperar el “palito abollador de ideologías”. Cientos de manifestantes sienten en sus cuerpos la mano dura del “Gobierno de los Derechos Humanos” que, como alguna vez dijo, no iban a reprimir la protesta social (irónico ¿no?). A esto se le suma la detención de decenas de asambleístas que por horas no se sabía dónde estaban, ya que la policía se los había llevado sin decir dónde. El gobernador de La Rioja, Beder Herrera, después de los hechos sale a poner paños fríos a la situación prometiendo dejar para más adelante el proyecto minero esperando que la gente de La Rioja se informe debidamente de esta actividad para lograr la licencia social que necesitan sus socios mineros. Me pregunto, ¿qué hace pensar a Beder Herrera que una persona desinformada de las consecuencias de la megaminería se enfrentaría a la minera, a la policía y su gobierno? Y para ellos algún “ecofascista” que no entiende la importancia del desarrollo de la producción nacional y la necesidad de inversionistas que pongan en movimiento la economía argentina. Para nosotros, los de la vereda de enfrente, solo alguien que tiene la conciencia suficiente de que no quiere ser tratado como un pueblo descartable para el resto del mundo y que sabe que las ganancias de esas empresas solo llenan los bolsillos de los empresarios y su camarilla de políticos burgueses adictos. Esto por un lado.

Posteriormente en nuestra provincia detienen a Elena Ríos por manifestarle al gobernador Pako Pérez que “defienda los intereses de los mendocinos, no el de las mineras”. Con esta acción el gobernador de Mendoza se mostró a tono con la política nacional. Lo paradójico fue que en esa misma semana se reunían aquí Gioja, Beder Herrera y Paco Perez, casi una cumbre de gobernadores mineros. Pero después de Famatina no qusieron avivar el avispero, posponiendo el tema de la agenda de debate.

A estos sucesos no se hizo esperara la persecución y represión en distintos pueblos de Catamarca, donde los asambleístas cortaban la ruta para impedir que los camiones mineros llegasen a Bajo La Alumbrera. La imagen de la represión son brutales, como ensordecedor era el silencio de CFK. El uso de la Ley Antiterrorista se pone en práctica: esta es la respuesta que tiene el gobierno a los pedidos de cese de la actividad minera en Catamarca, como en otras regiones: palo y a la bolsa. Pero recordemos que la persecución a los que luchan no es nueva para este gobiernos lo que se ha demostrado con los mas de 5000 procesados por luchar como la Mega causa Kraft donde es reconocida la infiltración y espionaje de gendarmería, lo único que cambia ahora es la cara legal, hay algo más claro.

Lo peor de todo es que la impunidad de los K no termina acá, más tarde la presidenta dialoga con un supuesto trabajador minero a favor de la minería y en contra de las manifestaciones, a lo que Cristina agradece sus palabras y expone las opiniones de este “trabajador” como las verídicas. Pero una vez mas la realidad supera la ficción y este trabajador en realidad no es un trabajador minero sino que es el presidente de Partido Justicialista de Olavarría. Literalmente se nos ríe en la cara.

El terror no termina acá. Andagalá se ve sitiada por patotas mineras que no dejan entrar ni salir a nadie, estos patoteros son contratados para cortar toda iniciátiva de resistencia en este poblado que hace dos años era unos de los primeros en conocer la mano dura del gobierno Nac and Pop. Después de esto la misma policía comienza a allanar las casas de los manifestantes en busca…no sabemos muy bien de qué…pero la estrategia es presionar con el miedo. Catamarca se levanta de nuevo, las marchas en la capital y las asambleas en los pueblos ya es práctica cotidiana, la idea es “la minera se tiene que ir”. Catamarca sigue resistiendo y hasta la fecha las acciones de los asambleístas no cesan.

Y Mendoza…

Hagamos memoria. Las primeras movilizaciones contra la megaminería provendrán del interior de la provincia. Los departamentos del Valle de Uco son los primeros en advertir actividades de exploración en las cuencas del Río Tunuyán y en la Laguna del Diamante. Los cortes de calles y las asambleas de en los poblados surgen como una práctica nueva en estos sectores. La idea es clara, y la megaminería no se realiza allí. Se suman las asambleas de General Alvear, región donde estas empresas expoliadoras ya habían puesto sus fichas. Este proceso en conjunto tiene una expresión, la creación de la ley 7722 que prohíbe la megamineria a cielo abierto y el uso de cianuro. Es un gran triunfo de este movimiento.

Ante esto las mineras encaran por otro flanco, el Proyecto San Jorge en el Valle de Uspallata empieza a moverse. “Mirá como son las cosas viejo…” que entre los políticos gestores de este emprendimiento está nuestro actual gobernador Paco Pérez, en ese entonces Ministro de Infraestructura de Jake. Ese es el peso con el que tendrá que cargar en sus espaldas Pérez durante toda su campaña. Finalmente la situación lo acorrala y tiene que cajonear el proyecto, San Jorge no sale. Pero sabemos que esto es solo un disfraz de cordero, este gobierno si quiere impulsar la megaminería solo necesita tiempo.

En la última semana el movimiento tiene otra conquista, la Ampliación de la Reserva hídrica de la zona que va desde el volcán Tupungatito hasta la Laguna del Diamante (4). Excelente noticia, pero con notas desentonantes detrás. El intendente de San Carlos, Jorge Difonso del Partido Demócrata (fiel aliado del PRO en la provincia) junto con el intendente de Tunuyán, Martín Aveiro (un cristinista orgulloso) se hacen presentes en la legislatura. El doble discurso es de los dos: son estos partidos patronales los responsables del trabajo en negro en el campo, el trabajo infantil y hacen vista gorda con los patrones de los trabajadores golondrinas que viven hacinados en toldos mientras dura la temporada del agro.

Mientras tanto, la provincia, por “incentivo” de la Casa Rosada, pasa a formar parte de la nueva Organización Federal de los Estados Mineros (OFEM). Demasiado contradictorio. La miseria del kircherismo organizado: Feliner, gobernador de Jujuy; Beder Herrera, gobernador de La Rioja; Urtubey, gobernador de Salta; Gioja, gobernador “antifacista” de San Juan; Sapag, gobernador de Neuquén; Buzzi, gobernador de Chubut y la tan aclamada gobernadora de Catamarca, Corpacci. La propuesta es hacer empresas mixtas entre estas trasnacionales y el Estado para garantizar el aumento de fondos que recibe el Estado por esta actividad (el 3% por si no lo recordábamos). Tal acción ya la he visto antes. Se intenta hacer un escudo protector a estas empresas para que sus negocios se desarrollen sin ninguna trabazón como lo hizo ya la ley 24.196 de Menem en el año 1993 abriendo el camino a las inversiones de estas empresas imperialistas.

Todo sigue igual, o peor que ayer.

Los 90 fueron el “for sale” de la cordillera, ahora esto es acompañado por la gestión manteniendo el marco legal y colocando lo frutilla del postre con la Ley Antiterrorista. La OFEM pasaría a ser el órgano colegiado que allanará el camino para que estos pulpos imperialistas se coloquen sus grandes empresas en nuestro territorio, poniendo hasta las fuerzas armadas del Estado a su servicio.

Es una situación realmente incómoda para el gobierno de los DDHH, ya que no puede llevar esta política hasta el final. Ya lo expresaron los asambleístas reprimidos en Catamarca: “nos usaron para llegar al Gobierno en las elecciones y, ahora, nos balean” (Los Andes 10/2/2012). La expectativas en este gobierno empiezan a caerse, las principales demandas no son tomadas, los silencios expresan los límites de la recuperación del régimen político burgués en la Argentina (1). Todo esto hoy los hace tartamudear, o mejor dicho, callar. El kirchenrismo se enfrenta hoy al agotamiento de su modelo, al fin de un ciclo. Con un desastre económico mundial y la necesidad de contar con dinero para seguir el pan y circo la situación empezará a tomar una “sintonía fina”.

--------------
(1) “Y el silencio es fundamental. Tiene un alto significado político. Cristina no puede condenar lo que avala en cada aparición pública. Pero tampoco puede avalar lo que muestra la continuidad con la vieja política de los 90’. En esos silencios se expresan los límites de la recuperación del régimen político burgués en la Argentina” http://apuntesdefrontera.blogspot.com/2012/02/tinogasta-entre-el-silencio-de-cristina.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario